sábado, agosto 05, 2023

EL CUARTETO GIANNEO OFRECIÓ CONCIERTO DEL MEDIODÍA EN LA SALA PRINCIPAL

El concierto que comento no ocurrió en la Sala Casacuberta; se recordará que escribí
allí en el anterior concierto que también era un cuarteto: el Petrus, con Pablo Saraví y Hernán
Briático (violines), Denis Golovin (viola) y Cecilia Slamig (violonchelo). En ambos el primer
violín viene de muchos años de concertino o en la Filarmónica o en la Sinfónica Nacional.
Ocurrió que estaba disponible la sala principal (Coronado) y así estuvo el Cuarteto Gianneo
liderado por Luis Roggero, tan ligado a la Nacional. Curiosamente en ambos cuartetos dominan
los violines. Sebastián Masci a través de los años ha dado datos sobre las obras que se
escucharon. En este concierto yo no conocía a los de la viola (Fernando Rojas Huespe) o el
violonchelo (Esdras Campos). A diferencia del concierto anterior, el primer violín pidió varias
veces que se escucharan los cuatro entre sí para mejorar la afinación. Nada melódico, sino
comparar sonidos. Pero salvo esa molestia la calidad fue de primer orden. Muy intenso
Campos.
Como siempre fue un placer leer en el programa las explicaciones de Claudia Guzmán,
que siempre hace apreciar el sentido de cada obra. Primero, de Wolfgang Mozart el Cuarteto
para cuerdas Nº 4 en Do mayor, K. 157. Mozart estuvo en Milán en el otoño de 1772, a los 16
años. Ya había realizado en 1770 a los 14 años su asombrosa ópera "Mitridate Re di Ponto"
(tengo una notable grabación y estuve en la ciudad de Buenos Aires cuando se estrenó). En
Milán iba a completar una ópera de gran interés, "Lucio Silla" (también he apreciado su
excelente grabación). Obviamente el compositor tenía asimilado el gusto por la música
italiana, y esto se reflejó también en 6 cuartetos y en las famosas K. 136 a 138, sinfonías para
cuerdas. El Cuarteto Nº 4 no tiene minué sino que sigue a Vivaldi: "Allegro", "Andante" y
"Presto", sin Minué. Pero también al milanés Giovanni Battista Sammartini, que escribió una
cantidad considerable de sinfonías y cuartetos. Conozco muy poco de Sammartini y
lamentablemente no tengo estos 6 cuartetos mozartianos. Habiendo escuchado el encanto del
Nº 4 en la muy buena interpretación del Gianneo les agradezco haber iniciado el concierto con
tanto criterio y calidad. Guzmán considera que hay fuerte influencia de las óperas, sobre todo
en el primer violín (el Andante parece un aria). Y coincido con respecto al Presto: las síncopas
le dan un carácter atrayente (sobre todo en la muy rápida coda).
El "Movimiento de cuarteto en do menor, D. 703", de Franz Schubert, me impresionó
cuando en plena adolescencia conocí una grabación vienesa en un magnífico disco
Westminster
cuya obra complementaria era nada menos que el cuarteto Nº 12, "Quartettsatz", junto con el
extraordinario Cuarteto Nº 14, "La muerte y la doncella". Quien mira el R.E.D. Classical 2000 de
las grabaciones se encuentra con unas 25 versiones de ambas. El "Movimiento de cuarteto"
data de diciembre de 1820, apenas 23 años de edad. "Allegro assai" en do menor: un allegro
de sonata con 2 temas; bien dice Guzmán: "vértigo, suspenso y lirismo"; llegó a escribir 40
compases de un segundo movimiento pero lo interrumpió. Recién a los 27 años volvió a la
composición de cuarteto con el llamado "Rosamunda". Fascinante información con respecto al
movimiento: "Fue Johannes Brahms quien adquirió el manuscrito; organizó su estreno
póstumo el 1 de marzo de 1867 en Viena y lo publicó en 1870". Y bien, el Cuarteto Gianneo
ofreció una versión intensa de primer orden; una elección inteligente y positiva.
Piotr Ilich Tchaikovsky recibió en 1871 (31 años) "la propuesta del Conservatorio de
Moscú de organizar un concierto dedicado a obras de su autoría." Famoso fue el Cuarteto para
cuerdas Nº 1 en Re mayor, Op. 11. Dura una media hora en 4 movimientos: "Moderato e
semplice; Andante cantabile; Scherzo, allegro non tanto e con fuoco; y "Finale: Allegro giusto –
Allegro vivace". Fue sin duda la belleza del "Andante cantábile" la que logró un notable éxito;
cita "una antigua canción folklórica" proveniente de Ucrania; la arreglo para su colección de
"50 canciones folklóricas". Vale la pena mencionar que si bien la Nº 1 es la que venció,
Tchaikovsky compuso otras tres: las tengo grabadas por el Cuarteto Borodin y son: Cuarteto en

un movimiento, de 1865; Cuarteto Nº 2, op.22, 1874, 35 minutos: y Nº 3, op.30, 1876, 36
minutos.
El Cuarteto Gianneo se lució dando calidad a cada movimiento de distinto carácter.
Su extra fue divertido: el Gato de Napolitano. Pablo Bardin

No hay comentarios.: