Pocas óperas han tenido un camino tan accidentado como (poniendo su título completo) "Lady Macbeth del Distrito de Mtsensk" de Dmitri Shostakovich. El compositor ya había debutado en el arte lírico con su desopilante sátira absurdista "La nariz" ("Nos"), que comentaré dentro de unas semanas en versión del Met, y ya entonces había sido censurado (la obra quedó prohibida por muchas décadas). Nacido en 1906, ya demostró su gran talento en la Primera Sinfonía escrita a los 19 años; "La nariz" es de 1928, asombrosos 22 años. Inició "Lady Macbeth…" en 1930 y la terminó en 1932, apenas 26 años; se estrenó el 22 de enero 1934 en la Maly Operny (Ópera Pequeña) de Leningrado y dos días después en Moscú, con gran éxito popular y crítico, nada menos que 177 representaciones; además se presentó en provincias rusas y en algunas ciudades europeas. Pero fue en ese año que Stalin inició el Gran Terror, la monumental purga que llegó a millones de muertos (incluso varios amigos cercanos de Shostakovich); el 26 de Enero de 1936 Stalin presencia una función de la ópera y repentinamente Pravda ataca violentamente la obra y el compositor; no sólo queda prohibida la ópera sino también su Cuarta sinfonía; tanto las dos óperas como la sinfonía sólo podrán escucharse después de la muerte de Stalin, pese a que paradójicamente la Quinta sinfonía logra un gran éxito en 1937; en la portada figura una frase de Shostakovich: "Reacción de un artista soviético ante las justas críticas"; y la prensa soviética lo alaba; pero la partitura llega pronto a Europa y Estados Unidos y tiene también allí poderoso apoyo; tengo una grabación de Rodzinski con la Orquesta de Cleveland de principios del vinilo, probablemente procedente de discos de pasta, ya que tuve la Primera por ellos en discos de 78 rpm (ahora pasada a CD por un especialista que vino a mi casa). Si bien no lo reflejan los artículos del Grove, hubo comentarios de Rostropovich revelando que el final de la Quinta debe tocarse mucho más lento y dista de ser un himno triunfal. Entendámonos: Shostakovich siempre fue comunista pero se sintió acosado por Stalin y en peligro de muerte en varios momentos de su vida.
Bastante tiempo después de la muerte de Stalin el 5 de marzo de 1953 (¡el mismo día en que falleció Prokofiev!), se repuso "Lady Macbeth…" pero con algunos cambios, y llamándose "Katerina Izmaylova", op. 114: el 8 de enero de 1963 en el Teatro Stanislavsky-Nemirovsky-Danchenko en Moscú, no en el Bolshoi. Cambios: dos Interludios fueron alterados, se cambiaron frases de la escena de la seducción, hubo un agregado ideológico en la música de los prisioneros y en varios lugares se cambió el texto y se hicieron transposiciones vocales. Era la época de Khrushchev, paradójicamente enfrentado con Kennedy por los misiles nucleares en Cuba pero bastante menos duro en la censura interna de las obras musicales. "Katerina Izmaylova" se ofreció en múltiples lugares europeos y llegó al Colón de Valenti Ferro, en traducción italiana: fue el 26 de abril de 1968, dirigida por Vaclav Smetácek con régie de Karel Jernek, escenografía de Frantisek Troester y vestuario de Olga Filippi; muy buena puesta. Katerina: Jarmila Rudolfova; Sergei: Ivo Zidek; Zinovy: Eduardo Sarramida; Boris: Otakar Kraus; Sargento de Policía: Gian-Piero Mastromei; Viejo convicto: Carlos Feller. Una buena mezcla de artistas checos (que seguramente lo cantaron en checo en el Národni Dívadlo praguense) y argentinos, y con puesta del Národni. Poco tiempo después compré los vinilos de la grabación de 1967 Melodiya/Angel por el Coro y la Orquesta del Teatro Stanislavsky-Nemirovich-Danchenko de Moscú dirigidos por Gennadi Provatorov; Katerina: Eleonora Andreyeva; Sergei: Gennady Yefimov; Zinovy: Vyacheslav Radzievsky; Boris: Eduard Bulavin; Sargento de Policía: Vladimir Generalov; Viejo Convicto: Georgy Dudarev.
Entre los grandes artistas soviéticos fueron varios los disidentes; el gran violoncelista Mstislav Rostropovich y su mujer, la notable soprano Galina Vishnevskaya, siempre apoyaron a Shostakovich. Khrushchev perdió apoyo y fue reemplazado por Brezhnev; con él volvió una etapa mucho más severa y yo la viví en mi primera visita a Rusia: Leningrado y Moscú; en esta última vi dos bellas funciones en el Bolshoi: "Eugen Onegin" (Tchaikovsky) y "La novia del Zar" de Rimsky-Korsakov; programas sólo en ruso y en cirílico pero muy buenos repartos, dirección y puesta (Abril 1967); cerrados los monasterios, imposible visitar el Anillo Dorado cercano a Moscú con las mejores iglesias antiguas. Rostropovich fue traído por el Mozarteum primero como violoncelista (memorables suites de Bach en el Museo de Arte Decorativo) y luego como Director de la National Symphony de Washington D.C., que yo conocía muy bien por haber estudiado en la American University de esa ciudad en 1956-57 (antes de venir con Rostropovich a Buenos Aires lo hicieron con Howard Mitchell en 1958). Naturalmente, nombrar a Rostriopovich titular de la Orquesta de la ciudad de la Casa Blanca fue una decisión tanto política como artística. Lo conocí siendo su traductor en Buenos Aires en una conferencia de prensa del Mozarteum y me resultó una persona sumamente simpática. En cuanto a Vishnevskaya, una memorable "Aida" en el Covent Garden (8 de febrero de 1964) me permitió verlas y escucharlas por única vez tanto a ella como a Giulietta Simionato, además de apreciar a Jon Vickers en Radames.
El matrimonio fue el responsable artístico de la primera grabación de "Lady Macbeth…" en su estado original. Fue grabada en 1979 para EMI con Rostropovich dirigiendo la Filarmónica de Londres, el Ambrosian Opera Chorus (John McCarthy) y un admirable reparto: Vishnevskaya; Sergei: Nicolai Gedda; Zinovy: Werner Krenn; Boris: Dimiter Petkov; Sargento: Aage Haugland; Viejo convicto: Alexander Malta; Un paisano desprolijo: Robert Tear; Aksinya: Taru Valjakka; y Sonyetka, Birgit Finnilä. Salvo Vishnevskaya, ninguno era ruso entre los cantantes pero todos lo pronuncian como si lo fueran. Fue importantísima esta grabación y de allí en adelante la gran mayoría de los teatros volvieron al original. Rostropovich tuvo magníficas cualidades artísticas y humanas pero no admiro su narcisismo extremo, tal como se reflejó cuando la obra se dio dirigida por él en el Colón en 2001. Se dieron 7 funciones del 30 de marzo al 7 de abril con el siguiente reparto: Katerina: Svetlana Dobronravova y Svetlana Savina; Sergei: Christopher Ventris y Oleg Videman; Zinovy: Ioiry Komov y Ludovit Ludha; Boris: Valery Gilmanov y Andrei Antonov; Sargento: Svilen Raytchev; Viejo convicto: Antonov y Fyodor Kuznetsov; el Paisano desprolijo fue llamado aquí Viejo harapiento: Farit Khussainov y Komov; Aksinya: Liudmila Kasjanenko e Irina Nowikova; Sonyetchka: Lyutsina Kazachenko y Svetlana Rossiiskaia; y varios rusos y argentinos en roles de flanco. El narcisismo fue evidente porque la orquesta estuvo en el escenario y una pantalla reflejaba cada movimiento del director, según él porque era un alma gemela del compositor. Aparentemente por viajes anteriores Rostropovich conocía a Sergio Renán y esta versión se vio primero en España con régie de Renán, escenografía de Tito Egurza y Daniela Taiana y vestuario de Renata Schussheim. Y bien, como he narrado recientemente, conocí bastante a Renán por charlas informales en cafés en mano a mano, visión compartida de DVDs en casa de Camilión y algunos meses de trabajo con él; era una personalidad fascinante y me atrajo mucho poder hablar con él con toda libertad y coincidir a veces, otras no, cosa que no le molestó. Pero ciertamente él también era narcisista, además de ser un apasionado cultor de la ópera, y esta vez aceptó (me dijo) justamente porque el desafío era muy grande: la orquesta requerida no es de cámara sino plenamente sinfónica y ocupa mucho lugar; aunque el escenario del Colón es realmente amplio, la situación le obligó a conducir la acción por los bordes o por el fondo elevado. Pese a las dificultades consiguió una puesta bastante funcional, con buen apoyo de sus colaboradores; Rostropovich conocía la obra como si la hubiera creado, la Orquesta tocó bien y el reparto fue correcto y a veces algo más (Ventris); la obra es realmente ardua pero su impacto resulta innegable.
Hubo otra versión: la de Lombardero en el Argentino de La Plata. Aparte de cambios innecesarios, fue una función de razonable nivel, con un reparto eficaz; una meritoria decisión innovadora para un teatro al que luego de su partida se le pidieron "Bohèmes" y "Traviatas" (sí, Telerman…). Dir. de orquesta: Alejo Pérez, que para mi fallecido amigo Eduardo Giorello (de Ámbito) en una entrevista destacó varios aspectos de la obra: modernidad, audacia, disonancias brutales, formaciones acórdicas muy osadas y fragmentos atonales. Elenco: Natalia Kreslina, Folguer, Marcelo Puente, Iturralde, Gustavo Gibert, Alejandra Malvino, Carlos Bengolea, Ariel Cazes. Primera vez que se cantó en La Plata una ópera en ruso.
Nikolay Leskov (1831-95) es considerado uno de los mejores cuentistas rusos. Gran viajero y observador, su estilo está influido por Gogol. En 1865 publicó su obra más conocida, "Ledi Mabet Mtsenskogo uezda" (como se dice en ruso la ópera que comento), "cuya heroína apasionada vive y muere con violencia" (Encyclopedia Britannica). El libreto de la ópera es del compositor y de Aleksandr Preys. No he leído el cuento pero ya desde el título nos indica que Katerina es de armas llevar; varios comentarios que leí consideran que el compositor la suaviza; no lo creo así, ella mata con odio a Boris; pero mucho peor es su amante Sergei, tan sensual como ella pero infiel y audaz delincuente. Ambos son muy elementales, analfabetos, incapaces de prever dificultades. Hay un factor que une a Shostakovich con estos cuentistas del siglo anterior: la sátira a una sociedad mediocre, a la corrupción, a la burocracia (la burrocracia, decía mi padre), la exageración de la brutalidad, y por cierto estos eran los males de la Rusia de 1860. La Nobleza no pagaba impuestos y era abundante; el pueblo era ignorante y explotado por el sistema de los siervos; los sueldos estatales eran bajos. Faltaba educación, desarrollo de la economía, se gastaba mucho en guerras (Crimea, el Cáucaso) y se carecía de un sentido maduro del Estado; los que estaban en altos cargos eran serviles ante el Zar. Y salvo excepciones se avanzaba no por el talento sino por la senioridad. El gobierno central dominaba a los gobernadores y éstos a los principales oficiales de un distrito (cada provincia se dividía en varios distritos). No pude ubicar al distrito de Mtsensk, quizá sea un invento de Leskov, pero probablemente no sea muy distinto de los que vio en sus recorridas. Tolstoy será un líder del movimiento antisiervos y eventualmente llegarán reacciones mucho más peligrosas ligadas al nihiilismo anarquista que llevó al terrorismo pero también a rebeliones de trabajadores que harán inevitable la caída del Zar en 1917 (en plena Guerra Mundial) y al comunismo moderado de Kerensky que bien poco duró, y luego al leninismo y a la Guerra Civil, hasta llegar al stalinismo genocida. Es curioso que los dictadores suelen ser puritanos en materia sexual; Shostakovich no lo era, creía en el amor libre; hay en el libreto erotismo bastante explícito, y fue mala suerte que Stalin fuera a ver la ópera.
En mi catálogo RER 2000 de CDs figura otra grabación de buen nivel en la que Myung-Whun Chung dirige a la Orquesta de la Ópera de la Bastille; data de 1993 y es de DGG. Buen elenco: Ewing, Larin, Langridge, Haugland, Kocherga, Moll, Zaremba, Zednik y Ciesinski. Pero hay varias más; selecciono (datos de un buen amigo). Hay un DVD que proviene de una película; data de 1966 y es de "Katerina Izmailova"; Vishnevskaya actúa y canta; los otros sólo cantan y un actor los interpreta: Sergei (S): Vasil Tretyak (actor: Antyom Inozemtsev); Zinovy (Z): Vyacheslav Radzievsky (actor, Nikolai Bayarsky); y Boris (B): Alexander Vedernikov (actor, Alexandrovich Sokolov); dir., Konstantin Simeonov; Dreamlife. Las otras son todas de la versión original. DVD: K: Nadine Secunde; S: Ventris; Z: Francisco Vas; B: Kotcherga; dir, Alexander Anissimov; Liceo 2002. K: Jeanne-Michèle Charbonnet; S: Sergei Junsev; Z: Vsevolod Grivnev; B: Vaneev; dir, Conlon; Maggio Musicale Fiorentino, 2.008. CD: K, Maria Ewing; S: Vladimir Galouzine; Z: Mark Baker; B: Sergei Kopchak; dir, Conlon; MET 1994. K: Katarina Dalayman; S: Ventris; Z: Stefan Margita; B: John Tomlinson; dir, Pappano; Covent Garden 1994. K: Angela Denoke; S: Misha Didyk; Z: Marian Tabala; B: Kurt Rydl; dir, Ingo Metzmacher; Viena 2009.
Conocí hace ya muchos años a De Nederlandse Oper (Ópera de Holanda, en Amsterdam) cuando visitó la Brooklyn Academy of Music y ofreció una interesante versión de "Il ritorno d´Ulisse in Patria" de Monteverdi, con buen reparto y estilo. Décadas después presencié en DVD una horrible puesta de "Semiramide" de Rossini y pensé que la contaminación había llegado a Amsterdam. Pierre Audi había sido el régisseur de Monteverdi y ya entonces era el Director Artístico; él no fue el autor de esa triste parodia anti-rossiniana pero sí la permitió. Pero cuando vi los datos de los intérpretes de "Lady Macbeth de Mtsensk" decidí animarme a verla y pese a ciertas divergencias con el régisseur Martin Sutej valió la pena escuchar a la Orquesta del Concergebouw dirigida por el gran Mariss jansons y ver y escuchar a Eva Maria Westbroek como K, a Ventris como S (lo había cantado en Buenos Aires), al notable Vladimir Vaneev como B y Viejo Convicto (había cantado "Boris Godunov" con el Maryinsky en Buenos Aires) y a Ludovit Ludha como Zi (en la versión del Colón fue el segundo Z). Los colaboradores de Sutej fueron Martin Zehetgruber (escenografía), Heide Kastler (vestuario) y Reinhard Traub (luces).
Acto I, Escena I. Apenas unos pocos compases orquestales antes del monólogo de Katerina, descansando en su cama y bostezando. (Katerina es en ruso Ekaterina y a la manera de ellos se agrega su segundo nombre, Lvovna). La Rusia de entonces era generalmente muy aburrida y esto se refleja en el hartazgo de K: "Dormí, me levanté, tomé té con mi marido y luego volví a la cama. No tengo nada que hacer. ¡Qué aburrido es todo! Estaba mejor soltera. Era pobre pero tenía más libertad. Ahora la depresión que siento hace que tenga ganas de colgarme. Soy la mujer del eminente mercader Zinovy Borisovich Ismailov. Para mí la vida es ingrata, yo, la mujer del mercader". Ya en estos 5´ iniciales se apreció el talento dramático de Eva Maria Westbroek, una cantante de poderosos medios vocales que vive cada personaje con intensidad comunicativa. También pudo observarse la extraña contextura de la escenografía; difícil llamar cama una mera bolsa de dormir sobre el piso, y la estructura de la pieza, de aspecto muy básico, tenía una característica: el techo seguía, pasando la ventana. Por otro lado, no mencionó K el verdadero gran problema: la brutalidad de su suegro B que se notará justo después del monólogo. (Estoy comparando los dos libretos y veo que el monólogo de la segunda versión tiene el mismo contenido pero en distinto orden y dos agregados; "esto no es vida, es como ser sierva en un penal"; "los contratados manejan la harina, sólo yo no tengo nada que hacer"). Entra Boris Timofeyevich, hombre maduro (unos 60 años) y violento; el diálogo revela su carácter. Boris (B): "¿Habrá hongos hoy?" Katerina (K): "Habrá". B: "Me gustan mucho, con avenate de alforfón". K canta: "Que haya sol o tormenta, para mí es lo mismo". B: "Le dije a mi hijo: no te cases con K; pero no me hizo caso. ¡En 4 años de casada no produjiste un niño!" K: "¡No por mi culpa! Z es incapaz de engendrar". B: "Sos fría como un pez, no estimulas sus abrazos; no tenemos heredero para nuestra fortuna. Te gustaría enganchar a un joven y escaparte con él. No lo intentes; la muralla es alta, los perros están sueltos y confío en los trabajadores; y yo estoy siempre alerta. Prepara el veneno para las ratas, volvieron a comerse toda la harina", y se va. Hay una diferencia importante en la segunda versión: ella dice, cuando la acusan de no tener un niño: "Yo también quisiera tenerlo". Dice K al quedarse sola: "¡Sos una rata, tendrías que recibir el veneno!" Vaneev da una imagen amarga de B; es fácil detestarlo, y vocalmente da fuerza al personaje. Sale K; entran Zinovy Borisovich (Z), un molinero, varios sirvientes, incluso S. Expresa el Molinero: "Reventó la represa del molino y hay una enorme brecha". Z: "Tendré que ir yo". B: "Sí, debe ir el dueño, sin él nada se hace; no se puede confiar en los obreros". Obreros: "Ja ja ja". B: "¿De qué se ríen? ¡Vuestro patrón debe irse y ustedes no lo lamentan!" Y los obreros cantan un coro valseado abiertamente burlón: "Sí" (implícito "lo lamentamos"). "¿Por qué nos deja, patrón? Sin usted la vida será triste, aburrida. Nuestro albergue no vale sin usted, el trabajo sin usted no es trabajo. ¡Vuelva en cuanto pueda!" Claro está que el compositor ya había demostrado su habilidad para el sarcasmo en "La nariz". Z presenta a S a B: "Padre, éste es el nuevo obrero que contraté hoy". B: "¿Dónde trabajó antes?" S: "En lo de Kalganov". B: "¿Por qué lo echaron?" Pero la conversación se interrumpe porque están listos los caballos para llevar a Z, y B (¡en presencia de S!) le ordena a su hijo: "Despedite de tu mujer". Z: "Adiós, K", y en un alarde de mediocridad, le pide a B: "Decile que siga siendo mi obediente mujer". B a K: "Debes conseguir un juramento de ella: que te será fiel". Z: "¿Para qué si me voy por poco tiempo?" (entonces se está desdiciendo…). B: "Uno nunca sabe, las esposas jóvenes son todas iguales"; y entonces cita en francés (obviamente considerando que las francesas son infieles, unas tontas palabras presumiblemente para parecer culto): "S´il vous plait, rendez-vous, sauce provençale". "K, jura sobre el ícono sagrado que le serás fiel". K: "¡Juro!" (y en un golpe de audacia del régisseur, ¡se levanta y le da un beso en la boca a B, que reacciona asombrado! B: "Adiós, Z, despedite de tu mujer". Z: "¡Adiós, querida K!" B a K: "¡Arrodillate! Se va en un largo viaje, ¡llora por él!" Y a Z: "¡En camino!" Hay detalles distintos en "K. Izmaylova": después del juramento, B les dice a todos (porque los obreros también están), "Sentémonos unos instantes", todos lo hacen, y luego B se para y sigue la despedida, pero B en cambio exclama: "Largas despedidas, llantos inútiles" y luego sí "¡En camino!" Todos se van excepto Aksinya, K, S y B. Aksinya a S: "¿Qué hacés aquí, por qué no te fuiste?"; y entonces S sale. Aksinya a K en presencia de B: "Este nuevo obrero es un tremendo mujeriego. Es alto, de buen aspecto. En lo de Kalganov lo echaron por tener relaciones con la patrona" (así se entera B del motivo). B a K: "¿Por qué no lloras? Qué mujer: ¡le dice adiós al marido y no llora ni una lágrima!"
Este final de escena me lleva a tener algunas opiniones sobre lo que distintos autores expresan sobre la obra. El artículo de Calvocoressi en el Grove de 1954 la considera una ópera de "gran habilidad técnica y con una variedad de recursos pero con escasa autocrítica. Es una rara mezcla de estilos; usa cualquier método con tal de lograr los efectos que quiere: contención o insistencia e hipérbole, frialdad o viva emoción, caricatura y parodia o descripción realista y caracterización". Con lamentable carencia de sentido político menciona el "cambio de opinión" cuando las autoridades soviéticas (no menciona a Stalin) hacen decir a Pravda que la ópera es "burguesa, formalística, poco saludable y para el pueblo, ininteligible". Luego pretende que la Cuarta sinfonía fue descartada porque el compositor no estaba conforme con ella (¡) y que la Quinta sinfonía fue atacada en Occidente (¡). En suma, indigno de Grove. El New Grove es mucho más completo y extenso en el artículo de David Fanning sobre el compositor, en parte porque fue escrito después de la muerte de Shostakovich y también porque da su biografía con detalles y criterio mucho más informado. No hay que olvidar que Shostakovich en los años de Lenin fue muy influido por música que entonces se pudo apreciar gracias a la apertura cultural de Lunacharsky: Mahler, Hindemith, Krenek y Berg, autores que tienen que ver (además de la historia musical rusa y en especial Prokofiev) ya en el absurdismo de "La nariz" pero que en "Lady Macbeth de Mtsensk" llevan a la rara mezcla de parodia y tragedia. No sé si Shostakovich tuvo en cuenta a "Manon" (no lo menciona Fanning) pero hay un paralelo. Y ciertamente lo hay con el Dostoyevsky prisionero en un campo de concentración siberiano; muy probablemente nada supo de la asombrosa ópera de Janácek sobre ese tema pero sí conocía la obra del gran literato. Y por cierto hay influencia de Gogol y Gorki en cuanto a la corrupción y brutalidad de la gente; la desgraciada verdad es que esas llagas de mediados del s. XIX estaban plenamente en la época de Stalin. En The New Oxford History of Music, "The Modern Age", 1890-1960, hay un notable artículo de Gerald Abraham, "Music in the Soviet Union", donde cita muchas obras que Occidente no conoce aún hoy pero también comenta las importantes de Shostakovich y Prokofiev. Escribe: "Esas óperas de segunda categoría están eclipsadas por la única ópera soviética que, más allá de sus fallas, es la única que se conoce en todo el mundo lirico: ´Lady Macbeth del Distrito de Mtsensk´. Hay una mezcla incompatible de estilos: invención de gran belleza y poder y parodia burlesca". Y considera que K no es suficientemente malvada; creo que pasa que está rodeada de malvados y ha sido muy maltratada; eso no la hace una buena persona pero sí que el contexto es muy negativo. Los comentarios de Popov en el folleto de "Katerina Izmaylova" por un lado aciertan mencionando la gran variedad de la música adaptada a cada escena (interesante su mención de la combinación y unificación shakespeariana de lo trágico y lo grotesco; por algo Shostakovich compuso música incidental para "Hamlet" y décadas después la música de la película "Hamlet"), por otra pretende que K tiene "una bella y rica alma". Y también que la segunda versión es mejor que la primera; no estoy de acuerdo. Otro comentario en el folleto, firmado Shlifstein, cuenta el desarrollo de la ópera y aclara cuáles son los cambios importantes pero nada dice del lío Stalin (era tabú mencionarlo en la URSS), pretende que cuando se estrenó se llamó "K.I." en cambio del título verdadero; sí da un dato útil: la versión de 1935 fue dada en el Bolshoi de Moscú y la dirigió Melik-Pashaev. El otro folleto es el de la versión original dirigida por Rostropovich y lo escribe Solomon Volkov, el mismo de la polémica edición de las memorias del compositor (fue su asistente en los últimos años de vida de Shostakovich). Vale la pena reproducir algunas frases: "Cuando se estrenó en Leningrad, hubo críticos que escribieron que era la primera ópera rusa comparable a ´Pique Dame´ de Tchaikovsky en profundidad y magnitud". Cita luego a Pravda: "Caos en vez de música": "cacofonía, ruido musical". "Una brillante personalidad podía ser atacada no sólo por represión, también por el eterno y estupidizante aburrimiento ruso. Fue justo entonces que se quebró todo contacto con la música de Occidente". "La violencia/protesta se liga inevitablemente con la violencia/represión". En la ópera "la fuerza policial a la vez da miedo y divierte. Un mecanismo tan grotesco y terrible sólo es posible en una sociedad construida sobre la violencia; por eso varias escenas de violencia moral y física son esenciales en el significado de esta ópera". Además la sensualidad de ciertas escenas está unida a la vida real de Shostakovich: su turbulento amor con Nina Varzar se refleja en escenas de una franqueza chocante en esa época; en Estados Unidos hubo quien la llamó ´pornofonía´". Volkov también considera que los cambios en "K Izmailova" respondieron a la presión de las circunstancias.
El Interludio después de la Primera escena fue modificado en "K.I." utilizando material de la escena siguiente, pero ambos son valiosos y nos llevan al clima de abuso que se ve luego; música tensa, orquestada con imaginación, armonizada con fuertes disonancias, como son los minutos iniciales de las Sinfonías Nos. 2 y 3. La Segunda Escena transcurre en el patio de los Ismailov. Los obreros metieron a la gorda cocinera Aksynia en un barril (así figura en la síntesis argumental de Volkov ¡pero en la de Shlifstein la llaman ramera!; ¿por qué una ramera estaría denunciando a S?). Y se dedican a asediarla para divertirse, como masa bruta que son en la ópera. El barril tiene ambos extremos abiertos y no la dejan salir. Aksinya es sin duda uno de los roles más desagradables en la historia de la ópera, la pobre no puede hacer otra cosa que cantar gritando; Carole Wilson (que no me pareció particularmente gorda) cumplió con lo exigido, que además en esta puesta la deja con los senos al aire debido al manoseo de los obreros. Shostakovich aprovechó de su música para "Declarado muerto" la Bacanal. Es una de sus 13 músicas incidentales para piezas teatrales de distinto estilo; ésta se estrenó en octubre 1931 en el Music Hall de Leningrad; revista de Voyevodin y Riss. En apenas 2´30" vertiginosos Aksinya (A), Coro de obreros, Paisano andrajoso, Portero, Capataz y S se burlan y la manosean y ella reacciona dolorida y espantada; todo se va mezclando; doy lo que cada personaje, incluso el Coro, va diciendo. : "¡Ay! ¡Criatura sin vergüenza, no me pinches, me lastimás! ¡Afuera las manos, brutos sucios, cerdos!" Paisano andrajoso (el mismo que bastante más tarde desencadenará la tragedia encontrando el cadáver de Z): "¡Como un ruiseñor! ¡Palpémosla, estrujémosla! ¡Más fuerte! ¡Qué lindas tetas, qué suaves! ¡Jaja!" Portero: "Una cerda canta como un ruiseñor. ¡Qué nariz tiene, grande como para siete personas! ¡Esa pierna serviría para comer costillitas!" Obreros: "¡Qué linda voz, jaja!" Capataz: ¡"Está regordeta, qué brazos deliciosos, qué piernas, jaja!" S: "¡Déjenme tomarle el brazo, suave y caliente!" Siguiente sección múltiple: A: "Cerdos, mi pecho está cubierto de magulladuras! ¡Qué sinvergüenza, me rompió la falda!" S: "¡Es un espléndido pedazo de mujer, suave como la seda, pero su cara es granujienta, jaja!" Portero: "Hagamos una mamada". Paisano andrajoso: "¿Y? ¡jaja!" Obreros: "¡Qué linda voz, jaja!" No simultáneo: Portero y capataz, esta vez burlándose de S: "¡Rompé sus pantalones, Akyusha!" Obreros: "¡Jaja!" S: "¡Soltame!" Otra sección múltiple, pero donde todo se repite y se alterna: A: "¡Ayúdenme, me pinchó!" S: "¡Párenla, agárrenla!" Obreros: "¡Jaja, qué linda voz! Quedate quieta, A, agarrala, Seryozha!" No simultáneo: S: "¡Pará!"; A: "¡Cerdo!"; Obreros: "¡Nos desternillamos de risa!" Juntos, brevísimo: "S: "¡Ay!"; A: "¡Soltame!"; Obreros: "Jaja"! (Hay considerables detalles distintos en "K.I."). Y sobreviene lo imprevisto: Paisano andrajoso: "¡La patrona!" Aunque presenciaron todos la humillación que sufrió, le tienen respeto. K: "¿Qué te pasa?" A: "Me rompieron la falda" (¿Por qué calla los abusos y lastimaduras? ¿Vergüenza o miedo?" Pero se ven…). K a todos los otros: "Déjenla en paz. ¿De modo que les divierte burlarse de una mujer?" (¡Bastante más que burlarse!). S: "¿Y cómo nos divertimos si no?" (dato claro de cómo es S). K: ¿De modo que una mujer sólo vale para ser burlada?" S: "¿Y qué otra razón hay?" A: "¡Cerdo!" K se dirige a S pero todos miran: "Ustedes, hombres, se creen que son los únicos fuertes y corajudos, ¿los únicos con alguna sabiduría? " (extraña frase, casi todos son analfabetos y lo único que saben es su vida diaria y algo de naturaleza). "¿No saben que muchas veces las mujeres han logrado salvar a las familias de morirse de hambre? ¿Y que en tiempo de guerra han vencido al enemigo? Y hubo etapas en las que sacrificaron sus vidas por sus maridos o novios" (muy cierto, las mujeres rusas demostraron gran coraje y resistencia a través de la historia). "Pero esto no significa nada para usted" (a S). "Le daré una buena paliza para demostrarle de qué es capaz una mujer" (algo temerario y tonto por parte de ella). S: "Señora, déjeme darle mi mano si ello es así" (ella lo hace, él aprieta). K: "Me lastima, suelte; es mi anillo". S: "Su anillo de casamiento la está penetrando"; pero no la larga, ella lo empuja y él cae, lastimándose. S: "Tengo una sugerencia, luchemos", y ella absurdamente acepta; S pide les dejen espacio. Tras unos segundos, le dice K: "¿Por qué paró?" S: "Con usted en mis brazos estuve pensando…¡que tengo mucha fuerza!", y K cae . K: "¡Dejemos esto, Seryozha!" (o sea, lo trata por su diminutivo, como tuteándolo, y se acaban de conocer de extraña manera). Y entra B: "¿Qué es esto?" Y ella miente ante todos: "Pasaba por aquí, tropecé con una bolsa y me caí; él me ayudó a levantarme pero también se cayó". Y el Paisano andrajoso lo avala: "Pasó exactamente así". B a los obreros: "¿Qué hacen allí, para qué creen que les pago? ¡Haraganes, borrachos!" A S: "Váyase, no esté por aquí". Y a K: "Haceme hongos fritos. Cuando vuelva tu marido le contaré todo" (no creyó nada de lo que le dijeron).
Segundo interludio, muy distinto: inicialmente violento, va cambiando y termina creando un clima melancólico. De vuelta en la habitación de K. K: de vuelta aburrida; entra B, la conmina a dormir, que no gaste vela, y se va. K canta un muy lento arioso; como en el de la Primera escena, se refiere a la naturaleza y sus animales y plantas: "La paloma busca a su pareja; el viento acaricia al abedul, pero nadie viene a verme"; la sensualidad la domina: "Nadie me besa, nadie acaricia mi blanco pecho, nadie me agota con sus abrazos apasionados" (o sea, Z es nulo). "Mi vida pasará sin una sonrisa, nadie vendrá a mí". El texto en "K.I." es muy distinto, sin sensualidad, centrado en la paloma; y en vez de desnudarse como en el original, meramente se sienta. En el libreto alguien llama a la puerta y resulta ser S; es en realidad una falla de criterio, porque ¿quién lo dejó entrar, siendo B un obsesivo en cuanto al hermetismo de la casa? Y bien, la escenografía en esta puesta buscó otra manera: el aventurero S se subió al techo (habrá conseguido una escalera) y se cuela en la habitación por la ventana. S: "Vine a pedirte algún libro". K: "No los tengo, no sé leer, y mi marido no lee libros" (mercader puro…). S: "Me muero de aburrimiento". K: "¿Por qué no te casás?" S: "Ninguna hija de patrón se casará conmigo y no me interesan las chicas comunes, soy un hombre sensitivo; por eso estoy aburrido. A veces los libros no curan el dolor de un alma, eso lo consigue el amor. ¿Si tuvieras a alguien en la casa?" Ella trata de que se vaya, él le dice que la lucha con ella fue el más feliz momento de su vida y la abraza; ella teme que venga B pero él la besa y seduce: "no amas a tu marido". K: "Hice un juramento, no me lleves a la ruina". B (del otro lado de la puerta): "K, ¿estás en la cama?" K: "Sí". B: "Bueno", y se va. K: "Ahora vete". S: "No me iré de aquí". K: "Mi suegro cerrará con llave" (la lógica es que siempre la cierra con llave). S: "Para mí una ventana vale como la puerta. ¡Mi Katya!" Y ya desnudo tiene relación sexual con una K entregada por completo con música de tórrida sensualidad. La régie de Sutej logra dar la impresión de que realmente está ocurriendo, con el truco cinematográfico de imagen cortada-imagen vista, pero es fundamental la intensidad de ambos intérpretes; ella, tras cantar admirablemente en todo el acto, revela su calidez; Ventris, que ha personificado a S tantas veces, domina el personaje por completo. Y la dirección de Jansons y la Orquesta son ideales.
Acto II, escena I. El patio de los Ismailov, de noche. B camina por él, monologa: "Esto le pasa a los viejos: no puedo dormir. Uno piensa si puede haber ladrones. Cuando era joven tampoco dormía pero por otra razón: cantaba canciones ante las ventanas de las mujeres casadas, a veces subía hasta las ventanas; tuve una buena vida. Z no es como yo. Hay luz en la ventana de K, parece que no puede dormir; es joven y no tiene quien la consuele. ¡Si yo tuviera 10 años menos sería bueno hasta para ella! Es aburrido para una mujer no tener hombre, ¡iré a verla!" (ya se cree capaz…). Y en ese momento S se despide de K y baja por la tubería de desagüe (¿se puede subir también?) pero sigue charlando con K y sin saberlo ellos B los ve y va reaccionando (un trío sui generis). B: "Escucho otra voz; mejor miraré"; K: "Espera un poco". S: "Va amaneciendo". K: "Estas 7 noches que pasamos juntos volaron"; B: "¡Traición! ¿Quién es él? ¡Qué escándalo!"; S: "Cuando tenés un amante el tiempo pasa rápido". S: "¡Adiós, Katya!" B: "¡Qué sinvergüenza!" B: "Es Sergey, el obrero nuevo; ladrón" (le roba la mujer a Z); K: "Seryozha, adiós!"; S: "¡Katya, adiós!" S llega al patio, B lo agarra del collar. B: "¿Dónde estuviste?" S: "Donde estuve ya no estoy" (ingeniosa contestación). B: "De todos nuestros tesoros eligió el mejor: pasó la noche con la mujer de mi hijo.". Y a toda voz: "¡Eh, todos!" A S: "Yo soy el patrón aquí". A los obreros: "¡Vengan todos aquí, pesqué a un ladrón!" Semi-vestidos salen los obreros y sirvientes al patio. S: "¿Qué quiere de mí?" B: "Quiero darle 500 latigazos" Obreros y sirvientes: "¡Dios, piedad!" B al portero: "¡Traeme el látigo, rápido!" Y al Paisano andrajoso: "Sacale la camisa". Éste: "Te la buscaste y la vas a ligar" (y le saca la camisa). Portero: "¿Lo va a azotar usted o quiere que lo haga otra persona?" B: "¡Lo haré yo!", y grita: "¡K!" K: "¿Qué pasa? ¡Estoy dormida!" (absurda respuesta). B: "¿Dormida? Hace poco viniste a la ventana y contaste las estrellas mientras esperabas el amanecer. ¡Mirá, pesqué a un ladrón y lo voy a azotar! ¡Empezamos!" Y desde ese momento durante 2 minutos lo azota con toda violencia mientras los obreros ahora se ríen y B comenta frustrado que S no se queja (al menos es estoico); la música refleja el odio y la angustia con la garra poderosa que también se encuentra en sus sinfonías. B: "Mirá, K, qué entretenido, le estoy sacando sangre, nos divertimos todos"; K: "¡Suéltelo!" B: "¡Tenés mucha sangre, con razón sos lujurioso!"; K: "¡Ábranme la puerta, está con llave!". B: "¡Pronto tendrás menos energía! ¿Por qué no gritás, querés parecer muy macho ante ella?"; K: "¡Ayúdeme, alguno! Me entregaré a quien me abra la puerta" (¡), "¡Saltaré desde la ventana! (¡). Paisano andrajoso: "¡Ya voy!" (irónico, bien sabe que ella lo dice por desesperación, que no ocurrirá, y que también él sufriría latigazos de B, que además no dejaría de castigar a S). Obreros se ríen, B los hace callar. K baja por la tubería (es ágil) y al estar en tierra quiere atacar a B pero los sirvientes por orden de B la agarran y no la dejan moverse. K: "¡Bruto, no le dejaré seguir, monstruo, suéltelo!"; B: "¡Contrólenla!"; y a S: "¡Chillá y pararé!", pero no chilla y B sigue dándole latigazos hasta que el que se cansa es B. Portero; "¿Quiere que siga yo?" B: "No, es suficiente, podría morir. Llévelo al cuarto de almacenar, mañana seguiremos azotándolo". Llevan a S y sueltan a K. Toda la escena anterior fue hábilmente puesta en escena, ya que los obreros y sirvientes rodearon a B y S de tal modo que B hacía los movimientos del azote y S estaba de espaldas al público pero se le veía la cabeza; cuando B paró no sólo el portero sino algunos obreros lo llevaron casi exánime. B dialoga con K: "Ahora tengo hambre; ¿quedó algo de la cena?" K: "Sí, hongos". B: "Eso, traémelos", y sale K. Portero: "Encerramos a S; he aquí las llaves". B: "Cabalgue hasta el molino, encuentre a Z, dígale que venga pronto, que hubo disturbios en casa". Se va el portero, entra K diciendo para sí: "El viejo morirá de veneno contra las ratas". B, comiendo los hongos: "Están ricos" (¿cómo, el veneno tiene buen gusto?), "sabés cocinarlos bien. Andá a vestirte, estás en enaguas. ¡Esperá, mis entrañas me abrasan, traeme agua!". K: "No". B: "¿Qué me pasa?" K: "Comió hongos de noche; muchos mueren por hacer eso". Para mí es un error garrafal de libreto (no sé si esto figura en la breve novela de Leskov): si los hongos son los comestibles tanto da comerlos al mediodía como a la noche; hay sí hongos venenosos pero no se venden; sí puede pasar que en el campo haya quien los traiga para su casa sin saber que son venenosos, pero ésta era una comida habitual de B y además ella añadió veneno contra las ratas, de modo que eran hongos comestibles. Y B no cae en la cuenta que ella es quien lo envenenó (¡): "Llamá al Pope, querida pequeña K; quizá sea cierto que me estoy muriendo. Viví mucho, pequé mucho". K encuentra las llaves en la ropa de B y se va corriendo. B: "Me estoy ahogando"; pierde el conocimiento. Se escucha a distancia la canción de los obreros que vienen a trabajar: "Nos esperan en los graneros; nos espera la harina que nos da de comer. Nuestro patrón es áspero y malo como cocodrilo"; ¡el coro llega con estas últimas palabras! Y la música es grotesca a propósito. B: "Alguno de ustedes corra y tráigame al Pope, estoy realmente mal. Consigan las llaves; ella es una ramera" (parece darse cuenta que ella se las llevó, pero la gente no entiende y creen que delira y que morirá). Llegan el Pope y el capataz. Shostakovich no era religioso y los comunistas cerraron monasterios e iglesias, de modo que el Pope del pueblo está ridiculizado en esta ópera. El Pope lo bendice y B le expresa: "Padre, escuche mi confesión. Mis pecados son muchos pero usted debe saber que la mía no es muerte natural, las ratas se mueren como yo con un veneno que es un polvo blanco"; entra K y B la señala: "¡Fue ella!", y muere. K disimula: "Oh, Boris Timofeyevich, ¿por qué nos dejaste? ¿Qué haremos Zinovy Borisovich sin ti?" El Pope a K: "¿Por qué murió? Era un viejo fuerte". Y ella repìte la misma zoncera sobre los hongos. El Pope cita a Gogol: "Esos hongos y esas sopas de pescado son demasiado para mí" y emite una estupidez propia: "Él no pudo morir como una rata: la rata muere, el hombre fallece". Pero se acuerda de que es Pope: "Celebro un pequeño Requiem: Deja, Señor, que tu siervo parta en paz". Hay cosas raras en esta puesta: ella aparece ensangrentada (obviamente porque abrazó a S), el Pope está medio borracho y pega saltitos, y los obreros aprovechan la muerte y roban cosas. Esta escena es aquella donde más se aprecia el trabajo del bajo que canta B; y Vaneev volvió a demostrar su amplia experiencia y verdad dramática con una voz que mantiene su solidez. Alexander Vassiliev dio gracia a su Pope de tercera categoría. El Coro hizo un buen trabajo dirigido por Winfried Maczewski. Cumplió correctamente Jan Polak como Portero y el tenor característico Alexandre Kravers perfiló bien su Paisano andrajoso pasado de vodka. Telón.
Acto II, escena II. Un magnífico Interludio: una passacaglia de poderoso dramatismo con intensas intervenciones de instrumentos graves: violoncelos, contrabajos, fagotes; las trompetas irrumpen con fuerza trágica. Habitación de K. Despierta a S y le pide que la bese hasta morderle los labios, que la sangre suba a su cabeza…¡y los íconos se caigan de los estantes! (en "K.I." nada hay de esto, pero sí afirma que lo quiere para toda la vida y que si no, prefiere no vivir (y pasará esto en el minuto final de la ópera). Pero S le dice: "Nuestro amor está por llegar a su fin, Z está por llegar; ¿cómo me sentiré sabiendo que irás a la cama con él?" K: "No ocurrirá" (supongo se refiere a relaciones sexuales, pero al parecer ya no las tenían antes de esta aventura). G contesta con hipocresía y evidenciando su ambición: "¿Puede ser un honor para vos, esposa de un eminente mercader, ser mi amante? ¡Cuánto daría por ser tu marido ante Dios! Así sólo podemos vernos de noche" (pero seguramente él debería dormir donde lo hacen los obreros y en consecuencia éstos saben que están juntos, presenciaron los azotes). K: "Te haré mercader y viviremos juntos". S: "¿Cómo lo harás?" K: "Eso es asunto mío" (se besan y S enseguida se queda dormido). K monologa y cree ver al fantasma de B y a éste maldiciéndola (se oye la voz de B); vuelve a despertar a S, que le dice que son visiones y la besa. Ambos se duermen (cuán fácilmente) pero pronto K se despierta y oye que alguien se acerca y nuevamente despierta a S; los perros no ladraron, es alguien que conocen; ahora S escucha los pasos. K: "Escondete, es Z", y S silba (¿por qué?). Z llega, le ordena abrir la puerta, ella se demora pero lo hace. Él ve los pantalones de S. Z: "¿Por qué la cama está hecha para dos?" K: "Te estaba esperando". Z: "¿Y ese cinturón?" K: "Lo encontré en el patio y lo traje para sujetar mi falda". Z: "Escuché muchas cosas en cuanto a tus faldas, tus amoríos, todo lo escuché". La música, rápida y ácida, se exacerba, y los dos entremezclan sus frases. K: "No podés juzgarme, criatura desagradable y patética. Tenés tanta vida como un pedazo de madera, sos débil y frío" (el texto en "K.I." es muy distinto). Z: "Está claro que me traicionaste. Lo sabré todo y te castigaré, te daré una paliza. Soy tu marido ante Dios y el Zar, responsable del honor de mi mujer. Decime la verdad". K: "No te contaré nada, sos incapaz de entenderme". Z la ataca con el cinturón; K: "¡S, me está golpeando, vení a protegerme!" Z: "¿Quién es este S?" Aparece S, K lo abraza. Z va a la ventana y grita: "¡Asesinato! ¡Vengan todos!" (¿intuyó que lo matarían?). K lo tira al suelo y empieza a estrangularlo; absurdamente Z casi sin voz pide un Pope y S le pega con un candelabro y lo mata. Es la única intervención importante de Z, bien interpretado por Ludovit Ludha, cuyo personaje es un mal amante pero no un flojo cuando se sabe traicionado. K: "Llevalo a la bodega; te iluminaré". Se mueve el escenario; sólo se ve la entrada a la bodega y todo lo que hace S es mover algunas piedras y poner a Z en el hueco. Ella está muy nerviosa y lo apura. Se besan. K: "Ahora sos mi marido" (en realidad podría serlo). En K.I. hay un innecesario retorno a la habitación por pocos segundos antes del telón; dicen lo mismo. Lo que hacen con el cadáver denota la ignorancia de ambos; es evidente que el cadáver se pudrirá y ese fuerte y asqueroso olor los delatará. Los obreros saben que son amantes; Z dijo que habló con ellos; resulta evidente que si al día siguiente no lo ven van a sospechar, sobre todo porque el padre también murió. A favor de ellos: los obreros detestan a padre e hijo y pueden pensar que estarán mejor con ella y por eso no denunciarían. No están en invierno; dudo que tuvieran la técnica para lograr barras de hielo rodeando el cadáver y que no se derritieran; y tampoco sé si una farmacia de pueblo de esa época tenía algún producto que evitara la putrefacción; probablemente no. Alternativa difícil: salir en un carro con heno a altas horas de la siguiente noche sin que nadie los viera e ir a algún lugar campestre, hacer un pozo profundo y dejar allí el cadáver, bastante lejos del camino habitual.
ACTO III, Escena I. K está cerca de la bodega; entra S; ambos están vestidos con buena ropa. K: "Cuando pienso que allí está Z, me asusto". S: "No te asusten los muertos; asustate de los que viven" (y resulta ser cierto). K: "Hoy nos casamos, es hora de ir a la iglesia; vayamos ya", y salen. Pero entra el Paisano andrajoso, borracho (¿cómo lo dejaron entrar?; muy inverosímil). Deben haber pasado unos cuantos días, supongo que 6 o 7. La música y el Interludio siguiente son el Shostakovich más burlón y vertiginoso, realizado con extraordinaria habilidad y gracia. El texto es divertido, una oda a la bebida marcada por "hics"; evoca a una chica, un amigo y un pariente: vino, vodka y cerveza. "Tomo vodka por tres todo el día y noche, verano, primavera o invierno, hasta dormirme. Siempre tomaré, soy un tipo alegre. Pero ahora estoy quebrado, tengo una estrella sin buena suerte. Ese S no tenía nada y ahora puede nadar en vodka. ¿Por qué ella eligió casarse con S y no conmigo? Aquí está la bodega, ella se para cerca muchas veces" (¿por qué lo sabe?) "y mira, mira. Bueno, yo también miraré, debe de haber buen vino". Quiebra la cerradura (¿cómo sabe hacerlo, con qué instrumento?), entra y sale rápidamente tapándose la nariz. "¡Qué horrible olor! Veré qué hay", y vuelve a entrar y ve al cadáver de Z (¿cómo, no estaba cubierto de piedras e invisible?). "¡El cadáver de Z! ¡A la policía!" Y sale corriendo. Buen trabajo de Alexandre Kravers. La misma música desde el principio frenética llega al paroxismo durante el Interludio. Stokowski, siempre alerta, en su momento hizo un arreglo ensamblando el Interludio con la música cantada, y ese fue mi primer contacto con la obra que me fascinó en una grabación con la Symphony of the Air. De modo que, sin saber nada de la ópera, me deleitaba con esa música, así como con un arreglo para violín y piano de la Polka de "La edad de oro", ballet de Shostakovich. Dos reflexiones: cómo puede ser que en esos 6 días S no haya profundizado el pozo? ¿Miedo o estupidez?; y ¿cómo evitarán que sus sirvientes vayan a la bodega, cosa absolutamente normal en cualquier casa de rico?; nada indica que ella y él sean abstemios, en cuyo caso podrían cerrar la bodega para siempre, pero incluso así primero venderían todos los barriles y no tiene lógica no utilizar a los sirvientes para el trabajo pesado; ¿y adónde llevarían los barriles? Si al patio, deben vender en el día, sino los obreros los robarían.
Acto III, escena II. Magnífica sátira de la policía corrupta. En la comisaría; el Sargento y un Coro de 20-24 policías. Sargento y Coro: "Pese a nuestro intenso trabajo nos pagan muy poco, y buenas coimas se ofrecen raramente". Sargento: "Un policía trabaja siempre aunque llueva y haya una tempestad". Sargento: "Un Sargento debe causar miedo para asustar a los nihilistas y preservar la paz y serenidad en la nación". "Hay una gran fiesta en lo de los Ismailov, esa pícara no me invita: me vengaré ya que se casa sin la presencia de las autoridades. Hay que buscar un pretexto, pero siempre se encuentra". Entra un policía diciendo que trae a un socialista; dice que no cree en Dios y habla sobre sapos. Maestro: "Me pregunté si un sapo podía tener un alma, y lo examiné; tiene un alma pero muy pequeña y no es inmortal". Sargento. "¡A la prisión!" Maestro: "¡Creo en Dios!"; lo llevan igual; una escenita absurda de las que seguramente había muchas. Entra el Paisano andrajoso y les cuenta que hay un cadáver en la bodega; se ríen y se van yendo. El Coro repite lo que dice el Sargento: "Rápido y no tendremos motivo de preocupación. Tendríamos comida y bebida, nos llenaríamos". Telón (la escenografía fue bien parca, apenas parecía una cárcel). Interludio más bien rápido, menos interesante que otros.
Acto III, Escena III. Jardín en la casa de los Ismailov cercano a la bodega. Las mesas forman 3 lados de un rectángulo; K y S en el centro. La fiesta va terminando, los huéspedes están borrachos, K muy nerviosa. Coro de huéspedes, brindando (no aclaran quiénes son, dato muy necesario): "¡Larga vida a la feliz pareja, enamorados y con armonía!" El Pope: "¡Besala!" (S lo hace, el Coro repite). K: "¡Amigos, sírvanse!" El Pope y el Coro siguen alabándola: "¡Es más bella que el sol en el cielo!" K se percata (¡recién entonces!) que la entrada a la bodega está rota. ¿De dónde provienen las bebidas que sirvió?; ¡Qué pensaron los sirvientes? Tampoco S se dio cuenta de lo que ocurrió. K le pide que vaya a ver; S lo hace y confirma. Entretanto los huéspedes se van durmiendo. K: "¡Debemos escaparnos!" S: ¿Y la heredad, el negocio?" K: "Debemos dejarlo todo. Llevaremos dinero, andá a buscarlo y rápido". Pero llegan las policías y de una manera muy ingeniosa en esta régie, porque es como si hubiera un corredor debajo del jardín con aperturas; de repente aparece el Sargento y luego los policías. K: "¡Estamos arruinados!"; S, que volvió: "¡Vámonos corriendo!" Pero se topan con el Sargento; K lo saluda. Sargento: "No nos invitó, pero vinimos; apareció un problemita". K abraza a S y dice al Sargento: "¡No estiremos el asunto, póngame las esposas! ¡S, perdoname, adiós!" (¿por qué le pide perdón? Los dos son culpables; y ¿por qué adiós, cuando sufrirán la misma suerte? Quizá crea que los van a separar). Sargento: golpea a S: "¡No te vas! ¡Llévenlos a la cárcel!" En "K.I." hay un detalle bien agregado: los huéspedes se despertaron y viendo lo que estaba pasando, dan 180 grados en su actitud: "¡Jaja, se lo merecen!". Muy buen trabajo de Nikita Storojev como el Sargento, con verdadero sentido del humor satírico.
Cuarto Acto. "Lady Macbeth" nada aclara sobre la zona; "K.I.", como corresponde, indica Siberia; los convictos acampan en la orilla de un río. Ambas versiones coinciden en estos datos: atardecer; hombres y mujeres separados, todos los convictos engrillados; los centinelas controlan. El Acto dura entre 32 y 35´ y la música es muy distinta a la de los actos anteriores: aquí el influjo de Mussorgsky es evidente y recuerdo la notable orquestación de Shostakovich de la versión Mussorgsky de "Boris Godunov", algo modernizada pero en el mismo espíritu trágico. La orquestación es de 1939, posterior a la ópera "Lady Macbeth", y también hizo una orquestación para un film sobre "Khowanshchina" 20 años después. Hay una diferencia fundamental entre las dos versiones: la original se inicia con el Viejo Convicto, "K.I." finaliza con él, como el Inocente en "Boris Godunov", y en este caso le doy la razón a "K.I.", pero por razones de ordenamiento respeto el original. Bien maquillado, lo cantó Vaneev muy bien, con un timbre profundo y triste; no molesta que haya sido antes B. El texto en el original es mucho más largo y distinto; en ambos varios párrafos son repetidos por el Coro. "Versta tras versta se sucede en procesión inacabable" (y las caminan con grillos). "¡Ruta en la que siguen estando los huesos de los muertos, en la que la sangre y el sudor siguieron fluyendo mientras se escuchaban los gemidos de los moribundos!" (el Coro repite). "¡Estepas interminables, días y noches incontables, pensamientos tan amargos, y guardias sin corazón!" (el Coro repìte). No olvidar la clara influencia de Dostoyevsky aunque no hayan llegado a la prisión; tampoco que ser enviado a una cárcel siberiana fue tan brutal con los zares como con Stalin. K: "Dejame pasar; te doy 20 kopecks para comprar vodka, Stepanych". El centinela así llamado: "¡Estas mujeres lujuriosas! ¡Pasá!" K llega hasta donde está S: "¡Todo el día sin poder verte! Se fue el dolor de mis pìernas, el cansancio y la angustia; todo lo olvido cuando estoy con vos". S: "¿También te olvidaste del mal que me hiciste? ¿Quién tiene la culpa de hacerme convicto? ¡Andate, me arruinaste la vida!" K:"¡Perdoname; qué tormento!" S: "¡Qué buena pieza esta mujer de mercader! Sólo sos una pícara". K vuelve a su lugar. K monologa: "¡Es duro cuando estás acostumbrada al honor y al respeto estar ante un juez!" (mala frase: ella fue maltratada por B). "O dormir sobre tierra helada y hacer miles de verstas. Pero no tengo la fuerza para tolerar la traición de S; ver que me odia, sentir su desdén es inaguantable". Por su parte S llega hasta Sonyetka (So, Lani Poulson) y la despierta; So: "¿Cómo llegaste hasta aquí?" S: "Le dí 25 kopecks al centinela, el dinero me lo dio mi mujer de mercader" (ambos la burlan). S: "So, ¡dame lo que mi corazón desea!" So: "Volvé a tu mujer". S: "Me tiene harto". So: "Por qué estuviste con ella?" S: "¡Por lo que podía sacarle!" So: "¡No puedo hacer lo que me pedís!" S: "¡Te quiero!" So: "Mis medias están rotas y tengo frío, conseguime otras de tu mujer". S va hasta K y le inventa que debe ir a un hospital porque los grillos le lastimaron las piernas y no tolera el dolor; le pide perdón y le dice que si pudiera tener medias de lana le dolería menos; ella se saca las que tiene puestas y se las da, todo el tiempo diciéndole que lo ama y no puede estar sin él. S: "Enseguida estaré de vuelta"; ella: "Por qué se fue?" S llega hasta So: "¡Aquí tenés las medias!¡Vamos, ahora sos mía!" y la lleva en brazos fuera del escenario mientras ella exclama, encantada: "¡Sos un bruto!" K se dio cuenta pero una mujer convicta y un Coro de convictas se burlan: "La mujer del mercader sigue sintiendo un amor abrasador pero ahora el deseo del amante se congeló. Nada le queda de su enlace con el novio. ¡Qué lío armaste! Estarás perdida sin S. ¡Entregame a nosotras las medias! No puede dormir sin S ni una noche, está aburrida sin él"; y no dejan pasar a K. (Es evidente que S o So les contó todo esto: las convictas son de muchos lados). K desesperada monologa en el proscenio: "En el bosque hay un lago casi redondo y muy profundo y su agua es negra como mi conciencia. Cuando hay viento se levantan olas en el lago que asustan; las hay siempre en Otoño". Vuelven S y So; él dice: "Nos parecemos a Adán y Eva; estuvimos juntos en el Paraíso". So a K: "¡Gracias por las medias! ¡Seryozha me las puso y besó mis `piernas para calentarlas! K es una tonta, no consiguió que S se quede con ella". Un sargento da orden de formar fila a los convictos. El Viejo Convicto le dice a K: "¿Escuchaste? ¡Nos vamos, sino nos darán con todo!" K se acerca a So que está apoyada en un parapeto del puente sobre el río; la empuja, So cae en el río y enseguida se tira K. Sargento: "Se ahogaron las dos, la corriente es demasiado fuerte. ¡Vuelvan a sus lugares!" (atraídos por los gritos de las dos mujeres, los convictos se habían acercado al parapeto). Viejo convicto: "Día tras día caminamos arrastrando nuestros grillos, contando las verstas, levantando polvo". Convictos: "Estepas interminables, pensamientos amargos, guardias sin corazón", se va escuchando cada vez más suave porque salieron del escenario, que queda vacío. Telón. Admirable la interpretación de Westbroek, gran artista en lo vocal y en la actuación; Ventris es detestable en este acto, como debe serlo; y Poulson dio relieve a So, parte breve pero fundamental. Muy bien el Coro. Janssons y su orquesta lograron el sonido triste estepario. Sólo falló la nula presencia del río, nada sugerido por la escenografía ni por la marcación del régisseur. Pero en total, una versión de gran calidad de una obra impactante, más allá de las fallas de libreto.
Pablo Bardin